Sentimientos en el viento.
Esta noche hay una parte de mi insostenible, triste y sombría, tras ver que por mucho que lata el corazón no hace que se mueva el mundo a su ritmo, sino que este mismo se adapte a los demás.
Pobre corazón, pobre alma que deambula sola con llanto y sin comprensión, mira a las estrellas pidiendo un deseo, que engañe al corazón ya que no puede engañar a la mente, pues se que es imposible que los sentimientos sean visibles en el aire cual melodía silba en invierno, para así poder calmar mi rabia y mi impotencia por tener que conformarme con caminar por el sombrío camino de la verdad.
Que fácil sería todo si pudiéramos leer los sentimientos en el aire, sentir lo que sienten con la brisa del viento, para saber tantas cosas que creías saber y que resulta ser un misterio, había tanto por dar, tanto por enseñar y tanto por comprender, que tal es el lamento del alma que llora esta noche ante tanta oscuridad en un camino de ida, sabiendo que no existe tal camino de vuelta y que depende de una palabra el camino que se ha de escoger.
Pues no solo es uno el que lucha, ni uno el que elige el camino.
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